Biól. Uriel Agustín Pineda Soto.
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El 4 de octubre es una fecha que se celebra con especial significado en todo el mundo, ya que conmemora tanto el Día Mundial de los Animales como la festividad de San Francisco de Asís, el santo patrono de los animales y de la ecología. Esta coincidencia no es casualidad, ya que San Francisco de Asís, ha sido reconocido por su profundo amor y respeto hacia la naturaleza, es un símbolo de la importancia de cuidar y proteger a todas las criaturas que comparten nuestro planeta.
En esta ocasión, exploremos esta interesante coincidencia y destacaré algunos ejemplos curiosos de animales que forman parte de la rica fauna de México, en sus diferentes categorías: invertebrados, peces, anfibios, reptiles, aves y mamíferos.
San Francisco de Asís y su amor por los animales:
San Francisco de Asís, nacido en Italia en el siglo XIII y su nombre fue Giovanni di Pietro Bernardone es uno de los santos más queridos y venerados en todo el mundo. Su conexión con la naturaleza y los animales es una parte fundamental de su legado. Se cuenta que solía hablar con los pájaros, llamándolos sus hermanos, y que tenía una profunda compasión por todas las criaturas vivientes. Según la historia que ha quedado hasta nuestros días, en sus momentos de oración y meditación, se rodeaba de estas criaturas, que supuestamente le entendían y con quienes se podía comunicar. Incluso se asegura que las aves podían formar bandadas en forma de cruz en honor a Cristo. También se cree que hizo manso a un lobo que devoraba animales de las granjas cercanas a donde se encontraba el santo(sic).
Algunos ejemplos curiosos de la fauna mexicana:
1. Monarca: El viaje de la mariposa naranja:
En la clasificación de los invertebrados, la mariposa monarca (Danaus plexippus) es un ejemplo sorprendente de migración. Cada año, millones de mariposas monarca viajan desde Canadá y Estados Unidos hasta los bosques de oyamel en Michoacán, México, cubriendo distancias de hasta 4,000 kilómetros. Este increíble viaje es un testimonio de la resistencia y la belleza de la naturaleza, y un recordatorio de la importancia de preservar los hábitats de estas mariposas.
2. Pez Ajolote: El tesoro acuático de México:
En la categoría de peces y anfibios, el ajolote (Ambystoma mexicanum) es una joya única. Este extraño animal, también conocido como «monstruo del agua», es un anfibio endémico de México, específicamente de los canales de Xochimilco. Lo más asombroso del ajolote es su capacidad para regenerar partes de su cuerpo, incluyendo extremidades, corazón y médula espinal. Esta habilidad lo hace invaluable para la investigación científica y es un símbolo de la riqueza de la biodiversidad en México.
3. Quetzal: El ave de los dioses mayas:
Entre las aves, el quetzal (Pharomachrus mocinno) es un tesoro cultural y natural. Este deslumbrante pájaro, conocido por su plumaje vibrante y su cola larga y esplendorosa, era considerado sagrado por los antiguos mayas y aztecas. México es uno de los pocos lugares donde se pueden encontrar quetzales en su hábitat natural, especialmente en las regiones montañosas del sureste mexicano. Su presencia en la mitología y la vida silvestre de México lo convierte en un emblema de la importancia de conservar los ecosistemas.
4. Vaquita Marina: La lucha por la supervivencia:
Dentro de la categoría de mamíferos, la vaquita marina (Phocoena sinus) es una historia de lucha y conservación. Este pequeño cetáceo es nativo del Golfo de California, pero su población se ha visto drásticamente reducida debido a la pesca ilegal y la degradación del hábitat. Hoy en día, la vaquita marina es una de las especies en mayor peligro de extinción del mundo, lo que destaca la urgencia de proteger a estas criaturas y su entorno marino.
Existen muchos ejemplos interesantes en todas las poblaciones de animales que por razones de espacio y lectura nos llevaría horas el poder desarrollarlos; sin embargo, no quiero dejarlos de lado para que también puedan investigarlos por curiosidad suya como lo es: La estructura de trabajo que tienen las abejas y las hormigas – hay textos que refieren que la observación del mismo Henry Ford hacia las hormigas lo llevó a estudiar de manera más profunda el trabajo que hacían éstos insectos ayudándole a desarrollar el proceso de producción en serie -. Los murciélagos y el tequila – la planta del agave a partir de la cuál se elabora el tequila la bebida más representativa de México pues solamente es polinizada por los murciélagos logrando de esta manera su reproducción y mejoramiento genético de la planta; El pez payaso y su cambio de sexo – cuando la hembra de pez payaso desaparece del núcleo familiar, el macho cambia de sexo y se transforma en hembra para asegurar la supervivencia de las crías; Las plumas de los búhos – las plumas que les permiten a los búhos acercarse a sus presas sin ser detectados es lo que ayudó a desarrollar trenes que no tuvieran efectos de impacto negativo al ingresar a túneles ferroviarios; La capacidad de los geckos y salamandras de fijarse a superficies imposibles para el ser humano – se estudian en robótica para desarrollar mecanismos con poder de sujeción fantásticos, en fin reitero que serían muchos los ejemplos para sorprendernos pero te invito a que también te preguntes y averigües al respecto.
En conclusión, el 4 de octubre es una fecha que nos invita a reflexionar sobre nuestro compromiso con la conservación y el respeto hacia todas las formas de vida en la Tierra, tal como lo hacía San Francisco de Asís. La biodiversidad de México nos ofrece ejemplos fascinantes de animales en todas las clasificaciones, recordándonos la belleza y la fragilidad de nuestro mundo natural y la importancia de cuidarlo para las generaciones futuras. En este día, celebremos a los animales y honremos su lugar en nuestro planeta.
